Tortilla de patatas - un clásico de la cocina española

Cómo ya le dediqué un post al plato nacional de Quebec: El pâté chinois. Hoy he decidido incluir uno de los mas típicos de la cocina española, para compensar un poco el blog..

Nunca he sido cocinillas y desde el nacimiento de mis hijos soy más bien de cocina de batalla sana y sencilla, por eso me gusta tanto cocinarla.

Es gracioso porque desde que vivo en Montreal la tortilla de patatas ha pasado de ser mi receta de cabecera a ser el plato gourment por excelencia, porque en toda celebración con amigos canadienses o con mi familia de aquí, cocino una....y aún con la sencillez de la receta y la falta de mi talento para los fogones, .... les encanta y siempre quedo como una reina.

Cada vez les digo lo mismo, que su preparación no es demasiado complicada pero cada persona le da un toque diferente y que nunca encuentras dos iguales, ni siquiera cocinada por la misma persona, doy fe de esto último.

Hay que añadir además, que en el resultado final influyen desde el tipo de patatas, al método que emplees para freírlas, cómo las cortes y hasta la práctica... que es lo que ha hecho definitivamente mejorar mis tortillas.

.....Y ahí va la receta para mis amigos canadienses:

Los Ingredientes:

6 patatas medianas

Una cebolla

6-7Huevos grandes

Aceite de oliva Virgen

Sal, dos cucharaditas

La preparación:

Lavar y pelar las patatas.
Cortar las patatas en rodajas muy finas, yo utilizo un rallador de queso... es práctico y se cortan rapídisimo.
Cortar la cebolla, y picarla muy finita.
En una sartén con aceite de oliva virgen, freír la mezcla de patatas y cebolla con las dos cucharaditas de sal.
Cuando las patatas estén bien fritas, más bien blanditas, las sacamos y escurrimos el aceite.
Batir los huevos en un recipiente amplio, y echar las patatas sobre los mismos y mezclar todo bien para que vayan absorbiendo el huevo batido.
Poner la sartén para hacer la tortilla a calentar a fuego medio, con un poco de aceite en el fondo, y cuando se caliente, echar la mezcla de huevos, patatas y cebolla.
Cuando la parte de abajo tenga ya una base creada con el huevo cuajado, usar un plato llano más ancho que la sartén para darle la vuelta con cuidado y volverla a echar sobre la sartén para que se haga por la otra cara.
Dejar a fuego lento-medio hasta que se cuaje bien esta otra mitad.